Exploramos Avatar: Frontiers of Pandora para contarles si el juego de Massive es la experiencia definitiva de Avatar o no. ¡Conocé los detalles en esta review!

Avatar es una de las películas más exitosas de la historia del cine y fue dirigida por James Cameron en el año 2009. Se trató de una de las películas más ambiciosas de la historia del cine, que además contó con el logro de ser la más taquillera de la historia sólo destronada por Avengers Endgame (aunque por un tecnicismo cuestionable haya sido momentáneamente). La secuela no llegaría hasta 2022 con Avatar: The Way of the Water, que llegó para contarnos lo que ocurrió 16 años después de la primera película, pero pasando primero por el anuncio de Avatar: Frontiers of Pandora en 2021. 

El juego fue desarrollado por Massive Entertainment y contó con el apoyo de los estudios Ubisoft Shanghai, Lighting Entertainment y 20th Century Games. Gracias a la gente de Ubisoft Latam pudimos probar Avatar: Frontiers of Pandora, y después de haberme perdido por las junglas y planicies de la luna localizada en el Sistema Alfa Centauri. Este no es el primer juego de la franquicia de James Cameron, en el año 2009 Avatar: The videogame salió para las consolas de la Séptima Generación de consolas y contó una precuela a los eventos de la primera película de Cameron. De alguna forma similar, Avatar: Frontiers of Pandora nos sumerge en el rico lore de Pandora y por la información que podemos encontrar dentro del juego, además de los períodos de tiempo presentados ocurre en paralelo (o poco antes) de los eventos de Way of the Water. 

¿Pero por qué no empezamos por el principio mejor? Para quienes no lo sepan Avatar nos lleva a un futuro en que la humanidad conquistó el viaje interestelar y encontró una luna del planeta Polifemo localizada en Alfa Centauri llamada Pandora. En este futuro lejano la humanidad entra en contacto con una raza de humanoides inteligentes llamado Na’vi, atrasados a nivel tecnológico pero con una fuerte conexión con la luna y el resto de sus habitantes. Dada la atmósfera tóxica de Pandora (para los humanos), se inicia el programa Avatar, el cual consiste en un híbrido humano/Na´vi controlado de forma remota por individuos genéticamente compatibles. ¡Y ahora les prometo que nos vamos directo al juego! 

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Antes de los puntos más álgidos de la primera película un programa de embajadores funcionó a la inversa del programa Avatar, en lugar de usar Avatares para entrar en contacto con los Na ́vi y “educarlos” (a.K.a. convencerlos de moverse para minerales las tierras), la RDA (Resources Development Administration) llevó a niños de una tribu (es decir secuestró) para educarlos cómo humanos y poder infiltrarse. Los eventos del comienzo del juego terminan por poner en criogenia a nuestro protagonista y su grupo durante 16 años cuando comienza realmente Avatar: Frontiers of Pandora.  

Acá es donde el juego se solapa un poco con la secuela de Avatar, Way of the water, la RDA está regresando y está vez van por todo. Los humanos que le hicieron frente y los Na’vi que defendieron sus tierras formaron una resistencia, y aunque nosotros nos unimos a ellos tenemos nuestro propio viaje por redescubrir que es ser un Na’vi. Se puede hacer un paralelismo entre el viaje de Jake durante Avatar, aunque en lugar de repetir la historia la gente de Massive Entertainment eligió ponernos directamente en la piel de un nativo que tuviera que redescubrir sus orígenes. No sólo esto sino que pertenecemos a una tribu de nómades que se creía desaparecida llamada los Sarentu. Esta tribu viajaba por todo Pandora contando a las otras tribus sobre sus viajes, y cómo jugadores vamos a hacer eso mismo en busca de descubrir quiénes somos y descubrir nuevas regiones de Pandora que no vimos antes (algo que la secuela exploró también). 

Sí hay algo que los estudios de Ubisoft saben hacer muy bien, en demasía, es crear mundos y universos altamente detallados y Frontiers of Pandora no es la excepción ¿Pero cómo se juega? Vamos a eso en un momento. Ya que estamos hablando del mundo de Pandora uno de los detalles que llama la atención ni bien comenzamos el juego es cómo la sensación de estar en un mundo alienígena se traslada al jugador, incluso siendo un Na´vi. Si recordamos la primera película, Pandora es un mundo peligroso y letal (en extremo), por lo que cualquier flor hermosa o criatura puede causarnos daño. 

Algo así pasa con el mundo crafteado por Massive ya que al salir al frondoso bosque Kinglor somos recibidos por una basta jungla repleta de cosas que nos pueden hacer daño, o beneficiarnos. Cuando dije que teníamos que aprender a ser Na´vi no era broma, además que nos vamos a tener que aprender a mover por Pandora, y a respetar los regalos de Eiwa. Ahora ya podemos empezar a hablar de cómo se juega Avatar: Frontiers of Pandora. En esencia, y algo que no sorprende a nadie, es básicamente un Far Cry de Avatar, PERO…y el pero es con mayúsculas a propósito, guiado por las reglas del universo de James Cameron, y aunque parezca poco es mucho. 

Si tenemos que describir lo común del juego con otros títulos de la compañía Francesa, nos vamos a encontrar un sandbox gigantesco (no tan open world ya que vamos a tener algunas limitaciones para movernos por el mapa si no progresamos en la historia). El juego contiene varias instalaciones de la RDA que tenemos que inhabilitar y usar el sigilo es casi fundamental (sobre todo si queremos conseguir los mejores recursos). Pero cómo dije, necesitamos seguir las reglas de Pandora y esto me lleva a varios detalles pequeños que se acumulan para dar una experiencia mucho más integral a los fanáticos de la franquicia. 

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Cuando comenzamos el juego por ejemplo somos inexpertos e inherentemente irrespetuosos ante algunas cosas, si matamos lo hacemos sin agradecerle a Eiwa, mientras que esto cambia cuando otros Na´vi comienzan a educarnos sobre la comunión entre Eiwa, Pandora y sus habitantes. Esto se traslada también a todos los recursos que recolectamos, cazar los grandes animales de Pandora puede ser desafiante, sobre todo si no tenemos un equipo de nivel alto, y esto se va a reflejar en los resultados que obtengamos. 

Algunas plantas requieren que las recolectemos en momentos del día o clima específicos si queremos obtener su mejor calidad. Además, que vamos a tener un pequeño minijuego si se quiere en el que hay que seleccionar la dirección correcta según la planta y apretar con cuidado los gatillos adaptativos del Dual Sense (al menos en la versión de PlayStation 5) para recolectarlos correctamente. Esto es importante, no sólo para ponernos en papel, sino porque necesitamos de los recursos de mejor calidad para fabricar los mejores equipos, y acá viene la forma de progresar en Avatar: Frontiers of Pandora. 

A diferencia de otros juegos donde obtenemos puntos de experiencia para subir de nivel, en el juego de Massive Entertainment leveleamos a nuestro personaje a través del equipo que crafteamos, ya sea taparrabo, pantalones, chaleco o las diferentes armas (con sus puntos de daño específicos). De esta forma, y similar al progreso en juegos cómo The Crew, las piezas son lo que nos aumenta de nivel y no la experiencia adquirida. Por supuesto que además tenemos un gran árbol de habilidades, por el cuál si nos podemos mover a través gracias a los puntos adquiridos, pero el juego también tiene reservado uno en particular que sólo podemos desbloquear en sitios especiales donde entramos en comunión con Eiwa, para aprender habilidades de nuestros ancestros 

Cómo para ir redondeando la reseña, Avatar: Frontiers of Pandora es un título enorme que aunque peca de muchos inconvenientes de los mundos abiertos de Ubisoft sabe cómo ofrecer algo fresco y propio de la franquicia. Creo que donde más destaca Frontiers of Pandora es sin duda en la experiencia, pero además tiene un gameplay muy divertido que mezcla el sigilo, los disparos en primera persona, y el plataformeo. Este último aspecto es si se quiere lo más novedoso y en lo particular me resultó bastante intuitivo y fluido sobre todo cuando comenzamos a desbloquear algunas habilidades extra y tenemos nuestro Ikran (¡Al que podemos nombrar!… y le pusimos Floof) 

Avatar: Frontiers of Pandora se puso a la venta el día 07 de diciembre de 2023 para las consolas PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC.

Conclusión personal

Personalmente Avatar es una franquicia que me gusta mucho, y aunque Way of the Water fue un dulce amargo (y un poco una desilusión) esperaba con muchas ansias Frontiers of Pandora. El resultado entregado por el título de Massive estuvo dentro de lo esperado y mientras no es un juego que se acerque a los GOTY de 2023, se trata de un juego muy divertido y una experiencia completa cargada de detalles para hacernos sentir un Na’vi. Si te gustan los juegos tipo Far Cry y sos fan de las películas de James Cameron, sin duda es un juego para vos. Pero si estos dos puntos no son suficientes, puede que no te pierdas nada nuevo bajo el sol esta vez.