Review – Minoria
02/09/2019Dentro de los indies, la saga de los Momodora hicieron de un pequeño nicho en el corazón de los jugadores amantes de los metroidvania gracias a su historia pero que logra meternos en el mundo de manera muy sutil y paulatina, sin mencionar el pixel art que esboza cada uno de estos, evolucionando en cada entrega desde un parecido similar a Cave Story hasta tener un estilo propio y precioso. En esta oportunidad, me toca darle una review a Minoria, el sucesor espiritual de la saga.
El reino de Ramezia se encuentra invadido por un aquelarre de brujas malignas que pretenden reestablecer el bosque maldito de Minoria mediante una ceremonia. Fran y Semilla, Hermanas enviadas de la Iglesia se adentran en el reino para poner un fin a esta amenaza que pone en riesgo a todo el mundo.
El juego se centra en brindar una exploración lo más metroidvaniesca posible con todo lo que es habitual en el género: puertas cerradas que no habilitaremos hasta conseguir la habilidad correcta, buscar de un lado a otro por los distintos ambientes y ecosistemas en búsqueda del siguiente paso a seguir, entre otros etcéteras que ya conocen. Pero lo que tenemos que saber es que lo más importante en Minoria es ofrecerte un reto y una historia atrapante para contar. Este último elemento se encuentra relatado de forma esparcida en diálogos entre los personajes y en documentos que podremos encontrar y coleccionar a medida que vamos recorriendo el reino y, si bien podemos prescindir completamente de ellos, nos amplían en gran manera nuestra visión acerca de los eventos del juego y nos provoca una auténtica curiosidad en saber más acerca del mundo que nos rodea.
Ya de buenas a primeras nos encontramos con que este juego tiene diferencias notables con sus hermanos mayores. La dificultad es elevada para incentivar a un gameplay mas rapido pero a la vez táctico, donde tendremos que aprovechar cada oportunidad que se nos abre para atacar y saber bien cuando esquivar porque cada golpe duele…¡Y duele mucho! Por lo que nos encontraremos sufriendo muertes de principio a fin. Con esto no quiero decir que el juego sea difícil al nivel de Dark Souls, solo que nos ofrecerá un reto digno y que con un poco de entrenamiento estaremos realizando acciones que antes ni pensábamos en hacer.
Con los nuevos retos surgen nuevos movimientos y aquí nuestra protagonista, la Hermana Semilla, es una auténtica máquina de matar eclesiástica. Por un lado tenemos la espada que nos permite realizar ataques rápidos y podemos cancelar sus acciones para esquivar sumado a que podremos realizar un parry que refleja todos los ataques enemigos permitiéndonos asestar un contraataque mortífero.
Sumado a lo anterior mencionado, podemos equipar inciensos que compraremos o descubramos explorando. Estos vendrían a ser una suerte de hechizos mágicos que podemos utilizar categorizando estos en pasivos o activos dependiendo su uso. Con este arsenal a nuestra disposición tenemos que empezar a experimentar y combinar nuestros golpes junto a las esencias para encontrar la mezcla que más nos guste según nuestra manera de jugar. Lo que sí, me sentí un poco decepcionado con la poca variedad de armas que podemos obtener las cuales cambian nuestro moveset en algunos casos. Dado la cantidad tan grande de esencias que podemos tener, un par de armas más o menos exóticas no hubieran venido mal.
No puedo hablar de Minoria sin mencionar lo hermoso que se ve y lo lograda que está la ambientación gracias a que combina fondos en 2D dibujados a mano con los personajes y enemigos modelados en un 3D que esboza movimientos muy fluidos e hipnotizantes pasado todo por un filtro visual frío que da la sensación de que todo el juego está iluminado bajo la luz de la luna en todo momento, un estilo que sin duda es más que bienvenido en este caso.
El juego en si no nos tomará mucho tiempo para pasarlo y peca de volverse muy fácil llegando al final, pero afortunadamente tendremos varios finales para conseguir, un modo new game + y hasta challenges y un boss secreto lo cual garantiza que le vamos a sacar todo el provecho que podamos. Las mecánicas de un metroidvania las tenemos muy a flor de piel y ya las vivimos en muchos juegos pero lo vital en estas es como se ejecutan y son tratadas con lo cual sin dudas, digo que Minoria hace una ejecución excelente y es un digno representante del género.
