A veces la vida nos da segundas oportunidades y en el mundo de los videojuegos a veces vienen en forma de remaster. No, no estoy hablando de Burnout Paradise porque es un juego re querido y le fue re bien. Aunque en su momento no lo pude probar, ahora tengo mi chance de ponerme en el asiento del conductor. es así que casi 12 años después me senté en la cabina del piloto para traerles esta reseña a toda velocidad. 

 Allá por el año 2008 Burnout Paradise vio la luz para las consolas Xbox 360 y PlayStation 3 y marcó el paso de Burnout a un mundo tipo Sand Box. Por si hay algún distraído que no conoce la franquicia, o como yo nunca se había subido, Burnout es una serie de juegos de carrera. y como dije antes, en 2008 dio paso al mundo abierto con Paradise. 

 La sexta generación de consolas dio paso a varios juegos de carreras de mundo abierto. La fiebre de las carreras callejeras llegó a su punto más alto con la serie de Vin Diesel Rápido y Furioso, lo que inspiró varios títulos. Los casos más emblemáticos fueron los Need For Speed Underground, y Most Wanted. Aunque varios juegos de carreras ya habían explotado el mundo abierto la serie Burnout optó por abrirse a este mundo en el paso a la séptima generación.

 El paquete que hoy tenemos remasterizado entre manos, fue resultado de sucesivas actualizaciones y mejoras. Cuando Burnout Paradise salió en 2008, no contó con varios de los modos que llegaron más tarde (como Marked Man y Road Rage). Por otro lado no solo varios modos de juego fueron añadidos después del lanzamiento, sino también paquetes de vehículos, y nuevas regiones. 

 Se puede  decir que la edición de la que disponemos ahora, que salió para PC, PlayStation 4, Xbox One, y ahora llega a Nintendo Switch es la edición definitiva. Pero antes de resumir todas las cosas que Burnout Paradise Remastered trae consigo, ¿Por que no les cuento mi experiencia con el juego? 

 Paradise grita arcade por todos lados y nos ofrece una experiencia hermosa desde el principio. El menú principal del juego está musicalizado con Paradise city de Guns n Roses, (¿Cómo podía ser de otra forma?) y desde ahí el juego no baja un solo segundo. El objetivo del juego es simple, llegar a lo más alto. Cuando llegamos a la ciudad se nos va a entregar una licencia de conducir y un vehículo. ¿Cómo lo hacemos entonces? A lo largo y ancho de Paradise City hay eventos en los que podemos participar. A medida que vamos superando eventos se agregan marcas a nuestra licencia, lo que nos permite acceder a licencias de mayor categoría. 

 Al principio requiere solo un par de carreras obtener la siguiente categoría, pero a medida que vamos ascendiendo las victorias requeridas aumentan significativamente. Por ejemplo, si para pasar a la categoría C necesitamos 5 victorias para pasar a la D vamos a necesitar 15. Avanzar no solo nos acerca a lo más alto, y le da sentido de competencia al juego, sino que nos permite desbloquear nuevos vehículos. Hay una gran cantidad de vehículos diferentes con los que podemos desplazarnos por Paradise City pero vamos a tener que conseguirlos, aunque más sobre eso más adelante. 

 Para los que nunca jugaron Burnout Paradise los diferentes eventos están dispuestos de forma bastante interesante en el mapa. Supongamos que queremos correr una carrera, para eso vamos a tener que buscar el evento. El mini mapa nos va a indicar donde hay eventos con puntos de diferentes colores, pero en la pantalla no vamos a tener un molesto indicador. En cambio vamos a ver señales de tránsito donde vamos a poder iniciar los diferentes eventos. 

 Cuando arrancamos una carrera se nos pone un objetivo en el mapa, usualmente separado por unas 3 millas que cubren gran parte de esta Los Ángeles ficticia. No hay mucha ciencia sobre cómo encarar esto es una carrera y tenemos que llegar primeros, pero la ruta es nuestra para elegir. La realidad es que el camino óptimo es en líneas generales uno solo, sin contar los atajos. Pero siempre podemos equivocarnos y tomar otra ruta, en esto el juego no nos va a penalizar, aunque va a depender de nosotros lograr completar la carrera. 

 Al comenzar la carrera se nos muestra brevemente el mapa de la ciudad, por lo que podemos empezar a trazar en la cabeza nuestra ruta. Además vamos a tener un indicador con las calles, una brújula, y la banderita del objetivo. Aunque el juego no nos va a decir si estamos yendo por la ruta correcta, nos vamos a poder dar una idea de que tan bien orientados vamos. Para llegar con éxito a destino hay que ser rápidos y chequear el mini mapa, orientarse con la brújula, y prestar mucha atención a los otros corredores. 

 Pero carreras no es lo único que nos vamos a encontrar en las calles de Paradise City. Entre los otros eventos con los que vamos a poder subir de categoría nuestra licencia podemos derribar a los contrincantes. En el modo Takedowns tenemos que eliminar un mínimo de coches para ganar, pero siempre es divertido ver cuantos podemos destruir antes de que se acabe el tiempo. Algo que se siente medio extraño de este modo es que no importa a donde vayamos los corredores no dejan de llegarnos por detrás, aunque no es necesariamente malo ya que es recontra arcade. 

 Por otro lado los eventos Marked Man nos obligan a ir desde nuestro punto de partida a la llegada pero evitando que los oponentes destruyan nuestro vehículo. En este modo la verdad que el reto es bastante relativo ya que podemos tener unos 3 accidentes antes que den la carrera por perdida. Por esto este modo es relativamente fácil, y aunque cometamos todos los errores posibles, es muy difícil perder. 

 Como bien mencioné antes los eventos van a estar repartidos por todo el mapa, pero primero tenemos que encontrarlos. En este sentido ya sea en Paradise City, o en Big Surf Island, tenemos que pasear y mucho. ¿Pero no es a eso a lo que vinimos? Así que mientras tanto vamos a tener los ojos bien abiertos. Cuando hablé de las carreras mencioné que podemos tomar atajos, esto es algo que Burnout Paradise tiene por todos lados. Pero no es solo para hacernos la vida más fácil cuando corremos, sino como parte de los objetivos a cumplir. Distribuidos por la ciudad hay portones que tenemos que romper, carteles que atravesar, y diversas rampas para usar. Mientras que algunas rampas solo nos sirven para hacer algunos barrel roll, otras sirven para llegar a lugares que a simple vista parecen imposibles de alcanzar, y abrirnos camino.

 Antes había mencionado el tema de los vehículos. A medida que progresamos las nuevas categorías, y las carreras ganadas, van a ir haciendo aparecer vehículos nuevos. Para abultar aún más nuestro garaje, hay que salir a buscar los nuevos vehículos. La cosa es simple y ultra violenta, supongamos que esa nueva camioneta que tanto nos gusta empieza a circular las calles de Paradise o de Big Surf. Siempre que veamos un vehículo nuevo surcando a toda velocidad las calles vamos a tener que sacarlo del camino y dejarlo destruido, y así es llevado a nuestro depósito de chatarras. El depósito sería nuestro garaje y donde vamos a poder elegir nuestro vehículo y la personalización del mismo. 

 Algo que no mencioné antes y que vale la pena traer a la mesa (metafórica), son los talleres y las estaciones de servicio. Siempre que nuestro vehículo sufra daños vamos a poder repararlo en un taller, pero para eso los vamos a tener que encontrar. Al igual que con los desafíos, los talleres, las estaciones, y los centros de pintura solo van a ser visibles en el mapa una vez que los hayamos encontrado. En lo que respecta a las estaciones de servicio y los talleres de pintura sirven para cargarnos nuestro turbo (o Burnout) y para personalizar a gusto nuestro vehículo. 

 Pero como si el juego no tuviera mucho ya para ofrecer, cuenta con un modo multijugador donde vamos a ver las variantes de los modos que repasamos antes. Y acá se pone más interesante, porque no es lo mismo medirse contra la máquina por intentar llegar a la meta, que contra otra persona. En el modo online vamos a poder armar una sala con hasta 8 jugadores donde podemos elegir si jugar actividades puntuales como de velocidad o stunts, o actividades aleatorias. 

 Burnout Paradise Remastered, al igual que allá por 2008, es un juego sobre divertirse. Se trata de un arcade puro y duro de conducción donde la ciudad es solamente un campo de juego para aprovechar de la forma que más nos plazca. Incluso si quisiéramos quedarnos en la misma sección y repetir una y otra vez esa carrera podríamos, pero nos perderíamos los secretos que Paradise City tiene para ofrecer.  Además el juego es como una versión definitiva de sí mismo, no solo se ve mejor a nivel visual, sino que cuenta con todos los agregados que salieron en el pasado. Con todo esto nos referimos a las expansiones como la isla Big Surf, las motos, y los vehículos especiales. Esto puede resultar atractivo tanto para quienes jugaron Burnout Paradise, como para los neófitos.

• Gameplay sencillo y fácil de dominar
• La música
• En extremo divertido
• Burnout Paradise en todos lados

• Por quejarme de algo, puede sentirse repetitivo