Y...acá va a ser uno de los puntos donde nos trabamos ya que el juego es una aventura gráfica que no da brazo a torcer en ningún momento. Tendremos un puntero, una rueda de acciones básicas (hablar, usar, mirar, etc) y nuestro inventario a nuestra disposición para sortear los obstáculos que se nos cruzan en el camino, pero ninguno de estos nos podrá salvar de una muerte segura y es que, como todo buen castillo abandonado y habitado anteriormente por magos, está lleno de trampas y peligros donde quiera y creeme que puedes morir de lo que sea. ¡Hasta de caerte por apuntar mal con el cursor!

Esta remake tiene unos detalles interesantes en su haber, de los cuales mencionare mas adelante, pero uno de ellos es un medidor de dificultad que es más que bienvenido. Tendremos un modo más amigable, donde el menú de acciones se acorta para mostrar solo lo relevante, los puzzles son menos complicados y hay menos ítems basura que están ahí en pos de engañarnos. Después tendremos el modo clásico, donde el conteo de antorchas que llevamos en el inventario es vital para sobrevivir puesto que estas se van gastando cada cierta cantidad de movimientos y al terminarse todas podemos morir. Por último el modo más hardcore es solo para expertos y promete darnos un real dolor de cabeza con sus puzzles enrevesados y su impronta más survival.

Pero si vamos más allá del dolor de cabeza de la dificultad, encontraremos que Shadowgate es un juego hermoso artísticamente. Atrás quedaron los gráficos de la versión de NES y de la Mac para dar paso a unos escenarios dibujados con una gran atención al detalle, donde nos quedaremos atónitos unos minutos apreciando el trabajo realizado antes de seguir nuestro camino. La música sabe recrear las tonadas originales a la vez de que mete su propio estilo que resulta acorde a la situación: es épica y heroica cuando estamos frente a frente con un dragón, y es solemne y ambiental si estamos investigando cuevas y santuarios.

Algo que maneja muy bien es el hecho de proporcionarte la historia a cuentagotas y depende completamente de nosotros el hilar las piezas para formar el cuadro completo. Con más libros y cartas agregadas contando la vida de los doce magos, del folklore y de las leyendas que existen en este mundo, todo esto completamente opcional, nos sumerge de lleno en el juego y nos abraza para no dejarnos ir hasta terminarlo.